El Quinteto para clarinete y cuerdas (2 violines, viola y violoncelo) en Si menor Op. 115, fue compuesto por Johannes Brahms en 1891 a sus 58 años de edad en Ischl (Austria) y publicado por la editorial Simrock de Berlín en marzo de 1892. Aclamado por todos los críticos como una de las obras maestras de la Música de Cámara con adjetivos enfáticos de sublime, excelsa e inigualable, tuvo un origen rápido y afortunado. Inspirado por el encuentro con el clarinetista Richard Mühlfeld, esta obra fue concebida después de un profundo estudio de las características del instrumento, realizado junto a este famoso solista de la corte de Meiningen en Alemania. Mozart, Brahms y Weber quedan por tanto emparentados por toda la eternidad, porque los tres son autores de obras para clarinete y los tres se sintieron estimulados por el encuentro con instrumentistas excepcionales: Johann Stadler en el caso de Mozart; Heinrich Barmann en el de Weber; y Richard Mühlfeld en el de Brahms. Es al milagro de ésta asociación al que se deben las cuatro obras maestras de Brahms con clarinete: el Trío para piano, clarinete y violonchelo Op. 114; el Quinteto para clarinete y cuerdas Op. 115; y las dos Sonatas Op. 120.
Se escuchará:
• Quinteto para clarinete y cuerdas (2 violines, viola y violoncelo) en Si menor Op. 115. Karl Leister (clarinete), Norbert Brainin y Siegmund Nissel (violines); Peter Schidlof (viola); Martin Lovett. (violonchelo). 36’23”
• Scherzo para piano Mi bemol menor, Op. 4. Wilhelm Kempff (piano). 8’58”