En el año 2001 su vida era una vida tranquila al lado de su esposo y sus hijos, Vivian en el Centro Poblado de Maito donde tenían un supermercado que abastecía a las veredas cercanas.

Pero un día esa paz desaparece cuando comienza a llegar grupos armados al pueblo. Acabando con la tranquilidad con la que estaban acostumbrados sus habitantes.

El 10 y 11  de julio del año 2002 el centro poblado de Maito y Oporapa sufren una toma guerrillera a la estación de policía sembrando el terror en todos sus habitantes al escuchar la explosión de cilindros bomba y múltiples ráfagas de fusil dejando como saldo pérdidas humanas y destrozos en las edificaciones del pueblo.

Julieta se ve obligada a dejarlo todo y salir como desplazada con sus hijos a la ciudad de Neiva cambiando su vida para siempre.
 

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