En sus primeros años, Ignacy Paderewski fue un buen intérprete, respetado, admirado, con excelentes críticas por lo que hacía al teclado. Tuvo una buena técnica, producto de practicar más de 10 horas diarias, en contraposición a su colega de ese entonces, Josef Hofmann, quien apenas si se sentaba al piano. Este continuo trabajo le permitió ejecutar en buena forma las obras más trascendentales del momento como los conciertos para piano y orquesta de Liszt, Chopin, Saint- Saëns y el suyo propio.
Música para hoy: Preludios Op. 28 No. 15 y 17 de Fryderyk Chopin. Grabaciones de Nueva York en mayo de 1928. La Campanella de Franz Liszt. Una grabación de Londres en junio de 1912. Impromtu en La bemol mayor, D. 935 No. 2 de Franz Schubert. Valses Op. 18; Op. 34 No. 1; y Op. 42 de Fryderyk Chopin grabadas en 1928 y 1922. Coro de las Hilanderas de la ópera El Holandés Errante de Richard Wagner, transcripción para piano de Franz Liszt, grabada en mayo de 1924 en Nueva Jersey. Marcha Fúnebre de la Sonata para piano No. 2 en Si bemol menor, Op. 35 de Fryderyk Chopin.
#UNAL_Radio @985unradio @unimedios @unradiomedellin