Jueves de economía.
Nuestra ganaderìa està colocada en un escenario de transiciòn,no ha abandonado el pastoreo que va en contraste con una producciòn fortista dictaminò Germàn Afanador.Tenemos una poblaciòn de 18 a 22 millones de reses y el productor ha pasado ha tener un prestigio asociado a una determinada raza.El ganadero actual es màs empresarial y ahora se usa menos tierra , que la potencialmente utilizada antes.Hoy en dìa surgen los criterios empresariales integràndose verticalmente, ligàndose a producciòn de carne y leche, con una visiòn màs financiera y econòmica del proceso.
El ganado criollo està a punto de desaparecer:y debemos resaltar casanareño,chino santandereano,costeño con cuernos,hartòn del valle,romo sinuano,sanmartinero,caqueteño y velàsquez.El paìs tiene como ventaja el mencionado material genètico, que recrea oportunidades ùnicas y nos falta vincularlos al mercado.
El nivel de emisiòn de gases CO2 y metano por la ganaderìa contribuye crìticamente a la producciòn de gases de efecto invernadero.
La intermediaciòn genera unas brechas muy grandes entre el precio de un producto en la finca y el precio del mercado.
El proyecto Ganaderìa Colombiana Sostenible està articulado institucionalmente,financiado con recursos del Gef (Fondo del Medio Ambiente Mundial),con Fedegan como operador.Està enfocado a intensificar la ganaderìa en cinco zonas del paìs,con la meta de impactar 50 mil hectàreas en sistemas silvopastoriles intensivos y otras, en un esquema de conservaciòn en corredores rivereños.Este proyecto tiene corazòn ganadero y alma ambiental,con la estrategia fundamental de introducir el concepto ambiental y de protecciòn al medio ambiente, desde los paisajes ganaderos.
Los sistemas silvopastoriles manejan varios estratos,con varios tipos de forrajes en los potreros; el segundo estrato es de arbustos(leguminosos) y el tercer estrato puede ser de frutales o maderables.Este sistema impacta en la productividad y tiene efectos importantes en la biodiversidad.Esto cambia el concepto tradicional de pasto y cielo.
Jaime Forero precisò que las vacas que tenemos ocupan mucho espacio,y este sistema tumba bosques, humedales y ecosistemas;ademàs, desplaza mano de obra.Lo primero que hay que hacer es fertilizar praderas y rotar el ganado,lo segundo es rotar la alimentaciòn y tercero, sembrar forrajeras.Deben haber establos para que no se compacte tanto el terreno.La desactualizaciòn de los catastros facilitan la evasiòn de impuestos, pero este debe ser un propòsiito nacional.
Enrique Murgueitìo destacò los proyectos del Cipav ,durante 25 años, el cual aplica investigaciòn con productores de todos los tamaños, promoviendo la recuperaciòn ambiental de la ganaderìa, empleando modelos de uso de la tierra màs eficientes y basados en la naturaleza.
Coloombia requiere un sano balance del recurso tierra y debemos segmentar su uso.Tenemos los contrastes màs grandes entre latifundio y minifundio.Estamos en mora de visualizar nichos y mercados de producciòn.
La salvaciòn de la ganaderìa no es vincular àrboles,hay otras alternativas que pueden vincular màs carbono ,declarò Edgar Càrdenas.
Invitado en cabina:
Germàn Afanador,director del Departamento de Producciòn Animal de la facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Nacional.
Contactos telefònicos:
Rodolfo Rodrìguez,coordinador general del Proyecto Gef-Fedegan.
Jaime Forero,director del Doctorado en Estudios Ambientales y Rurales de la Universidad Javeriana.
Edgar Càrdenas,profesor de la Universidad Nacional.
Enrique Murgueitìo,director ejecutivo del Cipav.