Miércoles de ciencia y tecnología

La biopiraterìa es una pràctica mediante la cual investigadores o empresas, utilizan biodiversidad de paìses en desarrollo y conocimientos de los pueblos indìgenas y campesinos, para realizar productos o servicios que se explotan comercial o industrialmente, sin la autorizaciòn de sus creadores o innovadores.

La Conferencia de Nagoya fue trascendental y marca un camino nuevo en paìses como el nuestro dijo Gonzalo Andrade.193 paìses lograron un acuerdo de consenso y entrarà en vigencia, una vez sea ratificado por una cantidad de 50 paìses.Colombia lo ratificò el 2 de febrero.El Protocolo fija un plan estratègico con objetivos y acciones para el año 2020, creando reglas para la utilizaiòn de beneficios genèticos.

Germàn Vèlez manifestò su preocupaciòn porque el Convenio de Diversidad Biològica ha demostrado-en 15 años-que ha sido un fracaso para conservar, proteger  y mantener un desarrollo sustentable de la biodiversidad.Este Convenio ha sido atravesado por el enfoque de privatizaciòn,comercializaciòn y la dinàmica de acceder a los recursos genèticos, aplicàndolos a la economìa global.No se ha podido proteger a los paìses que tienen biodiversidad y mucho menos,  el conocimiento tradicional o ancestral.

El problema de fondo es utilizar comercialmente las especies.Segùn Gonzalo Andrade serìa peor no tener el Convenio,pero expuso lo màs grave-segùn èl-y es que los investigadores no pueden acceder a los recursos genèticos en Colombia.Para Germàn Vèlez es que hay patentes sobre la biodiversidad y eso distorsiona todo, porque el comercio se atraviesa radicalmente en todos los procesos de negociaciòn.

Gustavo Adolfo Garcìa dijo que el problema no es solo jurìdico,y en regulaciòn lo tenemos todo,pero el Estado no tiene la capacidad logìstica, ni comercial  para explotar sus propios recursos y empieza a dar concesiones y autorizaciones , para que se exploten los recursos.

"La biopiraterìa existe y se puede documentar con los recursos genèticos colombianos" comentò Alejandro Chaparro.

Ahora se pueden patentar las plantas, el proceso para extraer un componente y el recurso biològico con su uso; y todo puede ser piraterìa.Una de las principales soluciones està en la presiòn de las sociedades.

Invitados en cabina:
Carlos Caicedo, consultor invitado.
Gonzalo Andrade, biòlogo, profesor de la facultad de Ciencias de la Universidad Nacional.
Germàn Vèlez, ingeniero agrònomo de la Universidad Nacional.

Contactos telefònicos:
Alejandro Chaparro,director del Grupo de Ingenierìa Genètica de Plantas y profesor de la Universidad Nacional.
Gustavo Adolfo Garcìa, abogado ,experto en Biojurìdica.