La historia cuenta que Nora Louise Kuzma, mejor conocida como Traci Lords, al cumplir la mayoría de edad intentó escapar del mercado de la carne y se reinventó, primero, probando suerte en Hollywood, y luego, como cantante. Así, después de un par de sencillos, lanzó al mercado en el año 1995 su único larga duración: “1.000 Fires”, una mezcla de downtempo, EDM y trance, con la música y la producción del grupo británico Juno Reactor, y por supuesto, con la voz y las letras de “la princesa del porno”. El resultado no está nada mal, es sensual, enérgico, atrevido. Hoy pondremos a girar este disco de culto, medio oculto, todo un placer culposo.

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