El 14 de marzo de 1778, Wolfgang Amadeus Mozart quien a la postre contaba con 22 años de edad, partió en compañía de su madre desde Mannheim hacia París a donde llegaron el día 23. Allí, Mozart compuso el Concierto para flauta y arpa en Do mayor, KV 299 que figura entre las primerísimas obras parisinas. Este concierto vio la luz por encargo de dos aristócratas que eran músicos aficionados: el duque de Guines (Louis Bonnières de Sovastre, ex embajador francés en Inglaterra) y su hija, famosa arpista a la que Mozart debía iniciar en la composición musical, pero que era – en palabras de Mozart – cordialmente estúpida y cordialmente perezosa.  

MÚSICA PARA HOY:
Concierto para flauta y arpa en Do mayor, KV 299
Ballet en Do mayor ‘Les petits riens’ (Las naderías), KV 299b
Gavota en Si bemol mayor, KV 300